de Alberto Prunetti
Publicado en JacobinItalia el 6 de agosto de 2021
Traducción inédita
Haría falta Nanni Balestrini para contar esta lucha obrera para hacernos sentir el olor de los gases lacrimógenos el silbido de los pitos el ritmo de los tambores el sudor de los cuerpos en este verano caliente en el que no se va de vacaciones sino a montar guardia en la fábrica porque los patrones querían arruinar las vacaciones de los obreros la vida de los obreros igual que han arruinado la vida de todos los que trabajan pero no han tenido en cuenta a los obreros
pensaban que sería como con los precarios con la clase media proletarizada que bastaba un mail que bastaban cuatro mastines mandados por la empresa de seguridad para alejar a los obreros de los medios de producción pensaban que para liquidarlos bastaba un jodido mail de mierda un jodido mail que decía gracias pero ya no nos hacéis falta
a los obreros a los que antes decían lo queremos todo les han mandado un mail pero ellos los obreros no han contestado con un mail sino que se han concentrado unos cuantos cientos delante de la fábrica y han hecho que se escaparan corriendo los perros guardianes y han tomado la fábrica y luego han llamado a todos y a todas a concentrarse todos y todas diciendo venid hemos tomado la fábrica la fábrica que es nuestra trabajamos en ella desde hace años de aquí dentro si hace falta que se vaya alguien que se vaya el patrón pero de aquí no sale ni un tornillo
y entonces el comité de empresa ha convocado una asamblea que ha convocado un estado de asamblea permanente que ha convocado una manifestación en Santa Croce que hacía un calor de muerte y había bengalas moradas y hemos ido todos a la ribera del Arno hasta un parquecillo para subirnos luego a los autocares y
se ha convocado una nueva asamblea y se ha empezado a sacar platos de pasta obrera y antifascista en la fábrica y en lugar de fabricar semiejes esa fábrica ha cambiado el tiempo muerto por el tiempo vivo y ha empezado a fabricar solidaridad y conflicto social incluso los estudiantes se han unido a la acampada permanente y las mujeres y los activistas y los jubilados y todos han convocado la asamblea permanente de este verano caliente en la que se ha dicho no sale un jodido tornillo de aquí pero sí salimos nosotros para hacer una manifestación a nivel estatal
y de toda Italia nos ponemos tras la pancarta roja con letras amarillas que dice colectivo de fábrica trabajadores GKN de Florencia y llegan otros trabajadores y sindicatos y colectivos y trabajadores migrantes y colectivos de mujeres y de personas LGTBQ y me encuentro también con un amigo mío nacido en América Latina que ahora trabaja como obrero en la manutención de una gran empresa de la alta costura y dice estoy todo el día con el taladro en la mano pero no me categorizan como metalmecánico me categorizan como multiservicios
y éste es el rostro de la nueva clase obrera que es interseccional y es el rostro de esta persona LGTB nacida en América Latina que ha superado cualquier frontera de género y de pasaporte y es hoy un obrero de la manutención y yo le digo que los cánticos de protesta en las manifestaciones en italia son a menudo tristes sin ritmo y no son alegres ni para cantar como en Argentina y él también me dice lo mismo pero mientras tanto explota un petardo y todos aplauden porque han salido de la nave de este barrio de naves industriales otros obreros que han desertado del puesto de trabajo y son todos obreros racializados afrodescendientes que nos alcanzan y nos separa solo la valla del patrón pero nos unen los aplausos y los cánticos y llegados a este punto llegados a este punto irrumpe como un grito un canto y este canto lo oigo por primera vez pero lo oiréis durante todo el verano ese canto de protesta que es un canto de alegría y de vida como una canción del verano que nace de no sé dónde quizás de una fiesta dentro de la GKN y que dice ooooo ooo ooo ooooo como en el estadio ooooo como en las gradas del estadio ooooo
ooooooocupémosla mientras que exista
y todos y todas se ponen a saltar y la fiebre sube a cuarenta y no es el virus es la lucha obrera y este año no te vayas al mar vete de vacaciones a ese asfalto incendiado donde pasan los camiones de la logística pero que si lo levantas debajo del asfalto te encuentras la playa de la alegría y las revueltas y un obrero delgado e inervado de músculos con la camiseta interior blanca pegada a la piel por el sudor se sube a hombros de otro y lo llevan en un desenfrenado triunfo metalmecánico en una apoteosis de revuelta que grita sublevémonos y llegados a este punto ante el cordón de las feministas y todas y todos cantan qué esfuerzo el que te pidoooo hoy tienes que ir a la huelga y venga adelante juntas unidas a luchar toda la semana la paso aquí contigo y no hay rendición no hay resignación sino solo mucha rabia que crece en mi interior
y luego volvemos a la fábrica mientras se disuelve el río rojo de la manifestación que es como estar en Anfield en las gradas del Liverpool cantando You’ll Never Walk Alone porque es verdad que no caminamos solos somos muchos y con nosotros caminan aquellos que están aún por nacer y los obreros de antes que ya no están pero que lo querían todo y parece que incluso el asfalto de la carretera y el acero de la fábrica empiezan a susurrar a pesar de todo todavía lo queremos todo
y los obreros hablan por el megáfono y nos preguntan que cómo estamos porque ellos están bien ellos tienen la solidaridad tienen la lucha pero nosotros somos precarios de mierda divididos incapaces de hacer frente común contra los patrones de hacer un piquete con nuestros compañeros de trabajo y nos dicen que esta lucha obrera también es por vosotros existe también por nosotros es por eso que estamos aquí porque ellos estaban siempre y siempre estarán cuando haya que
defender los salarios defender la fábrica hacer piquetes convocar la asamblea preparar los turnos para hacer guardia de noche y esas cosas hay que hacerlas ya en la primera asamblea y de cada asamblea nace una nueva asamblea y hace falta solidaridad central y periférica en la fábrica y en el territorio pero también mucha cerveza y agua y pasta y tortelli y la extensión estatal de las luchas es igual de fundamental que aguantar aquí dentro de las vallas y servir platos de macarrones a estas vallas pero hay que recordar que es soberana la asamblea de trabajadores y luego está el comité de empresa y luego el comité de la asamblea permanente y los grupos de apoyo porque esta es sí una lucha sindical pero se convierte en comunidad y es necesario interactuar con el territorio y construir un imaginario conflictivo y rápidamente
porque aquí las cosas cambian cada dos horas llegan del gobierno llegan periodistas llegan activistas llegan mails del patrón que dicen os tenéis que ir (vete tú patrón que por aquí va todo bien) y es necesario entender cómo se mueven los sindicatos los grandes y los de base y mañana concentraciones en la ciudad en cada jodido semáforo en zonas sensibles con panfletos y speeches y banderas del colectivo obrero y bengalas hace falta que el gobierno y los patrones sepan que de aquí no sale ni un tornillo que nosotros somos capaces de hacer que estas máquinas funcionen estos robots que hemos montado nosotros que hemos comprados con dinero que es nuestro en esta fábrica resplandeciente que no es como las fábricas de antes que estaban sucias de aceite de motor esta fábrica está reluciente puedes comer en el suelo es tecnología y acero es pantallas encendidas y un leve zumbido de aspiradoras porque no puede haber ni una mota de polvo si quieres que los robots en sus jaulas funcionen a la perfección para construir los semiejes de los automóviles no puede haber ni una mota de polvo
pero tiene que haber rabia mucha rabia obrera sin rendición sin resignación pero también vida mucha vida obrera y en cambio una vez más el otro día moría una obrera una mujer de cuarenta años nacida en Marruecos y así que existen aún los obreros y existen las obreras pero mueren engullidos por una máquina pero luchan aún contra la máquina y si las fábricas las gestionaran los obreros sería una fiesta el trabajo con los platos de pasta tres o cuatro horas de trabajo y tres horas de asambleas y platos de pasta y juegos de fábrica con todos empleados y ningún herido y ninguna obrera devorada por una máquina de acero que se llama capital que se llama beneficios que se llama inseguridad que se come a los obreros
pues entonces será mejor que nosotros comamos pasta en la fábrica que que la fábrica se nos coma
así que… ocupémosla mientras que exista
esta fábrica que ahora tiene un pequeño motocarro de tres ruedas que sirve cerveza enganchado a una pancarta roja Liverpool enganchada a un montacargas enganchado al corazón de esos estudiantes y a esas estudiantes del colectivo a esos viejetes del ANPI a esas lesbianas del cordón y a las feministas y a los de los centros sociales y de los sindicatos y de la FIOM y todos los que con el corazón empujaban sobre el asfalto de Champs sur le Bisence ese albatros con las alas demasiado grandes para volar que es la clase obrera que los burgueses y periodistas y sociólogos amigos de los patrones dicen que está muerta pero no camina aún con sandalias en el invierno de la patronal por el parque de Le Cascine con un abrigo puesto y las poesías de Rimbaud en el bolsillo
que ahora echa a volar sobre la banda nocturna del asfalto con las banderas rojas al viento esa roja bandera convertida en trapo y montada encima de una caravana obrera para agitarla por todos los pequeños círculos ARCI y los círculos obreros y los círculos de mutuo apoyo y las Casas del Pueblo de los alrededores de Florencia hasta llegar a un sitio que se llama Límite porque hemos llegado al límite hasta arriba de vino y de la cerveza a la que nuestra gente nos ha invitado en esta caravana porque la revolución tiene que ser una fiesta y ahora empiezan con las bengalas y los cánticos que siguen diciendo
oooooooooo… ocupémosla mientras que exista
y que parecen decir una vez más a los burgueses a los que hay que sorprender y a los patrones a los que hay que expropiar y a los sindicalistas demasiado bomberos y a los políticos que querrían hacernos
ir caminar trabajar
y a los ricos que nos tienen que dar el dinero que nos han quitado
que nos sublevamos
que paramos el desmantelamiento de la fábrica
que de aquí no saldrá ni un tornillo
que tras el invierno de la patronal y el verano de las acampadas de fábrica
habrá un otoño caliente
porque nadie para la rabia obrera
nadie para la rabia obrera
nadie para
a la clase obrera
nadie
3 respuestas a «Haría falta Nanni Balestrini para contar esta lucha obrera»
[…] palcos, alrededor del bar (aquí la presencia de los obreros fue granítica). Los protagonistas de la lucha obrera más potente de las últimas décadas se reunieron con su comunidad: si vosotros empujáis, nosotros […]
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[…] trata de las mismas prácticas que caracterizan la movilización obrera de la GKN [fábrica toscana ocupada en el verano de 2021 cuyo colectivo obrero ha desarrollado un amplio horizonte político, N. del T.], la cual se […]
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[…] en inglés, por Francesca Gabbriellini y Giacomo Gabbuti en Jacobin USA [en este blog tradujimos el particular relato sobre los inicios de esa historia escrito por Alberto Prunetti, N. del T.]. De ese texto, resulta especialmente interesante la […]
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